Considero que este tema, va a tocar tu alma. Léelo, medita en él, y cambia de actitud, lo bueno ya viene, está aquí. Feliz viaje.
2 Samuel 4:4
“Y Jonatán hijo de Saúl tenía un hijo lisiado de los pies. Tenía cinco años de edad cuando llegó de Jezreel la noticia de la muerte de Saúl y de Jonatán, y su nodriza le tomó y huyó; y mientras iba huyendo apresuradamente, se le cayó el niño y quedó cojo. Su nombre era Mefi-boset”.
Si hay algún personaje bíblico que nos pudiera representar en algunos momentos con mucha precisión, es este hombre llamado Mefiboset, no es muy mencionado en las escrituras, pero su historia es muy interesante y muy parecida a nuestras vidas por las situaciones y las luchas que hemos vivido y que en algunos casos nos han atormentado por mucho tiempo.
Fue muy lamentable la noticia ¡El rey y todos sus descendientes habían muerto en la batalla! Me imagino que todo el palacio se consternó, Pienso que la gente iba de un de un lugar a otro. ¿Y ahora que iba a suceder? Todos a la vez salieron corriendo, y fue en ese momento cuando la niñera de Mefiboset, lo toma en sus brazos, y sale huyendo, para proteger su vida, pues era un heredero y correría peligro, pero por las prisas y la aglomeración de la gente, sucede lo inesperado, se le cae de sus brazos y se golpean las pequeñas piernas del pequeño. En ese momento de su caída se marca un rumbo distinto para Mefiboset. ¡La vida le cambió en un segundo!
En un solo día le sobrevinieron muchas desgracias, murió su abuelo, murió su padre, perdió la posibilidad de llegar al trono, perdió las comodidades del palacio, perdió su dignidad, su nombre, su herencia. Y como si esto fuera poco, sus frágiles piernitas se le quebraron cuando accidentalmente la niñera lo dejo caer en la huida. No lo hizo intencionalmente, pues ella era quien lo cuidaba, pero sucedió un accidente irreversible.
Mefiboset no hizo nada malo. No fue su culpa. No obstante, tuvo que pagar el precio del error de otros por el resto de su vida. No parce justo. Algunas veces, las personas bien intencionadas nos pueden dejar caer. No tienen la intención de lastimarnos, pero probablemente cometieron un error y dijeron o hicieron algo que no deberían haber hecho, y ahora esa situación nos ha heredado a nosotros.
Fue una terrible tragedia y a la edad de cinco años Mefiboset quedó huérfano completamente solo, sin familia despojado de sus tierras y sus bienes y para evitar ser asesinado por los enemigos de su familia, porque esa era la costumbre antigua, que el nuevo rey exterminaría a todos los descendientes del rey anterior. Creció y vivió refugiado en una ciudad extranjera llamada Lodebar lejos de Jerusalén.
Lodebar significa tierra seca, árida, sin fruto, ciudad conocida por ser un lugar donde se refugiaban los endeudados, los despojados los perseguidos, los abusados, golpeados por la vida como Mefiboset. Lodebar también significa silencio, donde no hay comunicación, porque el dolor nos lleva al silencio, el sufrimiento nos lleva a vivir en temor a la inseguridad y a la desconfianza de nosotros mismos y de los que nos rodean. Solo nos refugiamos en el silencio, no pedimos ayuda.
Volviendo con Mefiboset, muchos años antes que el naciera, su padre Jonatán hizo un pacto con su mejor amigo David ya que David seria el siguiente Rey de Israel, Dios así lo había dispuesto. Ese pacto cambiaría el destino de Mefiboset.
Jonatán le hizo prometer a David: “Júrame que no apartaras tu misericordia de mi casa para siempre”. Y tiempo después cuando David tomó posesión como rey de Israel, recordó aquel pacto que hizo con su mejor amigo (2 Samuel capítulo 9). Dice que mandó llamar a Siba quien fue siervo de la casa de Saúl, y le pregunto: ¿Ha quedado alguno de la casa de Saúl, a quien haga yo misericordia por amor de Jonatán? Siba le contesto: Aún queda un hijo de Jonatán, que esta lisiado de ambos pies se llama Mefiboset y vive en Lodebar. Con el simple hecho de que viviera en Lodebar, El rey pudo suponer en qué condiciones se encontraba aquel hombre.
Inmediatamente envió que lo trajeran, me imagino que cuando llega aquel carruaje real de parte del palacio, toda la ciudad se quedó maravillada, y más Mefiboset, asustado cuando se da cuenta que vienen por él, de parte del rey, lo más obvio es que lo buscaran para quitarle la vida, como lo hicieron con toda su familia.
Pero cuando esta frente al rey, él le dice, No tengas temor Mefiboset yo hare contigo misericordia por amor a tu padre. Y te devolveré todas tus tierras y tus bienes, que te corresponden y tú vivirás en el palacio, comerás siempre a mi mesa. Imagínense la reacción de gozo que debió haber tenido aquel pobre hombre. Creo que yo en su lugar gritaría de alegría....... ¡Pero no fue así!
La condición emocional en que se encontraba Mefiboset, era muy deplorable, su autoestima estaba por los suelos, muy lastimada, y le responde: ¿Quién es tu siervo para que mires a un perro muerto como yo? Mientras que el rey lo veía como lo que él era realmente, un descendiente real, él se veía a sí mismo, como un desecho, no solo se veía así sino también se sentía de esa manera. ¡Qué tristeza! Pero el rey insistió en protegerlo y puso a su servicio a Siba aquel mismo hombre que sirvió a su casa antes de la tragedia. De ese día en adelante su vida cambio, fue como un hijo más para el rey y pudo disfrutar de todos los beneficios de la familia real. Fue revindicado a su lugar de honor. Al lugar que le pertenecía.
Que maravillosa historia, quizá Mefiboset nunca pensó que le sucedería algo así, tal vez creyó que tendría que terminar sus días en la penumbra, en la miseria y oscuridad, en la más terrible soledad, pero no fue así, ¡sus días cambiaron de una manera sorprendente!
Mefiboset representa a muchos de nosotros que fuimos abusados, violentados por otros o por el descuido de quienes se supone que debían protegernos pero en un momento dado nos dejaron caer, cargamos profundas heridas, amarguras, resentimientos y frustraciones que nos han impedido tener un proceso de desarrollo normal en esta vida.
Cuando todo parecía que iba bien en tu vida, de un momento a otro tu situación cambio, y las malas noticias fueron llegando a tu vida una tras otra. O desde que recuerdas, todo ha sido muy difícil para ti, alguien que se supone debía protegerte te dejo caer, te lastimó, te maltrato o abuso de ti. Tus padres, tu espos@, tu pareja, tus amigos, pudieron ser muchos de quien no esperabas que te soltaran cuando más los necesitabas.
Tus sueños de mantener un matrimonio feliz para toda la vida, se esfumaron porque el hombre o la mujer a quien amabas, te dejo caer, rompiendo así tus ilusiones. El querer ver siempre a tu padre como tu héroe, al primo, al tío, que sin misericordia abuso de ti, y tal vez nadie te creyó. Te dejaron caer cuando hicieron ese mal comentario de ti, que te daño. Y decidiste refugiarte en el silencio, guardar todo en tu corazón, decidiste internarte en Lodebar, donde la amargura y el dolor fueron creciendo en tu corazón, y el resentimiento no te dejo ser feliz ni ver con claridad la vida.
Amig@ sé que no has logrado superar aquella infidelidad, aun punza tu corazón como una arma mortal. Aquel maltrato emocional, va adherido a ti como parte tuya. Todo eso te ha dejado caer, y quebró tus ideales y tu esperanza.
Hay muchas personas que también se han alejado de Dios, porque le han fallado, han tropezado y han dejado caer aquella hermosa relación que tenían con Él, pero Dios te sigue amando, si le buscas con un corazón arrepentido, Él te escuchará. Dice la palabra, “si confesamos nuestros pecados Dios es fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos de toda maldad” 1 Juan 1:9. Él te espera con los brazos abiertos. Y si aún no le conoces como Salvador, hoy es el día, Él te ama, y está dispuesto a levantarte de donde estés. Solo entrégale tu corazón en esta hora.
Dios hizo un pacto de amor antes de que tú nacieras antes de que el mundo existiera, aun antes de que alguien te dejara caer y hace ya más de 2000 años en una cruz lo consumo, él decidió salvar tu vida, perdonarte y bendecirte y no porque lo merezcamos sino por puro amor. Su palabra lo dice. “Con amor eterno te he amado, por tanto te prolongue mi misericordia” Jeremías 31:3. Su amor por ti es incondicional.
Cuando tú crees que ya todo está perdido es cuando Dios te cubre con su gracia, te reviste de su santidad y te invita a ser libre y restaurad@, te invita a salir de ese estado, de soledad, de silencio, de ese lugar desértico como Lodebar, y quiere sentarte a su mesa, vestirte de las mejores ropas y llenar ese vacío que dejo en tu alma esa caída que sucedió en algún momento de tu vida.
Dios quiere sanar tu alma herida, no importa quién te haya dejado caer, aquí esta alguien que te quiere levantar y darte un nuevo comienzo. El desea que vivas a su lado para siempre, tiene reservada una silla para ti en su mesa.
A veces el dolor no te permite ver quien realmente eres, pero Dios, hoy quiere descubrir en ti tu verdadera identidad, ya no tienes que vivir atad@ a ese pasado que te impide vivir y servir con libertad, no lo olvides, fuiste diseñad@ a su imagen y semejanza, Su sangre te redimió, te rescato y te quiere restaurar ahora mismo, y te quiere reestablecer como lo que tú eres, un hijo de Dios, eres parte de la realeza espiritual.
“Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios”, ¡Con un propósito fuimos adquiridos por Él! “Para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable” 1 Pedro 2:9.
Dios te dice hoy; “Voy a restituir lo la vida te robó”. Dios va a susurrarle al oído de alguien que sea bueno con nosotros, que nos dé una buena oportunidad, que nos ofrezca trabajo, que nos dé un contrato, que nos ame tal como somos. Alguien se levantara de parte de Dios y resolverá nuestro problema. Probablemente usted haya sido dejado caer, pero no se desaliente. La justicia viene, la restauración viene, el favor de Dios viene, tú idónea viene, la promoción viene, la doble honra viene, los nuevos comienzos vienen.
¿Quieres aceptar tu verdadera posición en Dios este día? La decisión es tuya.
Entra a este link y permite que Dios hable a tu vida.
Feliz día, Dios los guarde y los proteja siempre.
Un abrazo.
Pastor Kike Escobar (WMF)
Unidad Internacional de Oración (UIO)
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