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Foto del escritorPs. Kike Escobar

Celebrándonos a sí mismos

Génesis 1:31


(NTV) “Entonces Dios miró todo lo que había hecho, ¡y vio que era muy bueno! Y pasó la tarde y llegó la mañana, así se cumplió el sexto día”.


(NRV1990) “Entonces Dios contempló todo lo que había hecho, y vio que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana, el día sexto”.


Dios pasó revista a Su obra: “Y vio Dios todo lo que había hecho”. Y así lo continúa haciendo. Algunas versiones Bíblicas dicen; “Contempló Dios, admirado Su obra”.


Todas las obras de sus manos están ante Su vista. Su omnisciencia (todo lo conoce) no puede ser separada de Su omnipotencia (todo lo puede). Pero esto fue la solemne reflexión de la Mente Eterna sobre las riquezas de Su sabiduría y los productos de Su poder. Con esto, Dios nos ha dado ejemplo para que revisemos nuestras obras. Cuando hemos terminado el quehacer del día, y vamos a entrar en el descanso de la noche, deberíamos consultar con nuestro corazón acerca de todo lo que hemos estado haciendo.


Dios observó que lo que había hecho era muy bueno. Usted es parte de la creación de Dios y Él está complacido por la manera en que lo creó. Si en ocasiones siente que carece de valor o que vale poco, recuerde que Dios lo creó por una buena razón. Usted es valioso para él.


Cuando Dios acabó la creación, se alabó a sí mismo. La mayoría del tiempo somos tan críticos con nosotros mismos, y estamos tan enfocados en lo que hemos hecho mal, que ni siquiera pensamos en elogiarnos a nosotros mismos.


Cuando nadie nos celebre, debemos aprender a celebrarnos a nosotros mismos. Cuando nadie nos elogia, debemos elogiarnos a nosotros mismos. No es tarea de otras personas mantenernos alentados; es tarea nuestra. Debe provenir de nuestro interior. Dios se alentó a sí mismo.


La felicidad es una proposición de dentro hacía a fuera. Si no somos felices con nosotros mismos, no podremos encontrar gozo en el diario vivir. Como dice la canción; “Estamos en un tiempo tan miserable, que si una no se alaba no hay quien lo alabe”.


Debemos adquirir el hábito, de celebrarnos a nosotros mismos. Dios lo hizo, nosotros también lo podemos hacer. No miremos lo malo, miremos lo bueno y sigamos adelante. Amén.


Dios los guarde y los proteja siempre.


Un abrazo.


Pastor Kike Escobar (WMF)

Unidad Internacional de Oración (UIO)

Restoration Church UK








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