1 Crónicas 29: 22-25
“Nuevamente coronaron a Salomón, el hijo de David, como su nuevo rey. Lo ungieron delante del Señor como su líder, y ungieron a Sadoc como sacerdote. Entonces Salomón subió al trono del Señor en lugar de su padre David, y tuvo éxito en todo, y todo Israel lo obedeció. Todos los oficiales, los guerreros y los hijos del rey David juraron lealtad al rey Salomón. Así que el Señor exaltó a Salomón a los ojos de todo Israel, y le dio un esplendor real aún mayor que a cualquier otro de los reyes anteriores de Israel”.
Podemos observar en este pasaje, cómo dieron por segunda vez la investidura (coronaron) del reino a Salomón hijo de David: Esta sin duda fue la coronación que se llevó a cabo después de que la rebelión de Adonías había sido derrotada (1 de Reyes 1-2). La primera vez (1 de Reyes 1:38-39) se hizo apresurada y repentinamente, y de una manera tumultuosa, debido a la sedición de Adonías; pero esta fue hecha con un buen respiro y gran solemnidad.
“Y se sentó Salomón por rey en el trono del Señor”: Todos los tronos son del Señor, por quien los reyes reinan, Proverbios 8:15-16 nos enseña que, “Por mí reinan los reyes, y los príncipes determinan justicia. Por mí dominan los príncipes, y todos los gobernadores juzgan la tierra”. Por este motivo es que debemos sujetarnos a las leyes de nuestros reinos o paises. Romanos 13:1 dice; “Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas”.
“El Señor, Le dio tal gloria en su reino, cual ningún rey la tuvo antes de él en Israel”: Esto era verdad, pero el lector sabio comprende que esto solo fue posible porque David lo hizo posible. La majestad de Salomón en realidad fue heredada por el trabajo, sabiduría, consagración y oraciones de su padre.
Salomón superó la riqueza y el honor de su padre. El legado de David se originó en su relación vital con Dios, y dio sus valores espirituales como herencia a Salomón. El dinero, herencia y el poder que dejamos a nuestros hijos son menos importantes que el legado espiritual que podemos darles. ¿Qué clase de legado estamos preparando para nuestros hijos?
Dios los guarde y los proteja siempre.
Pastor Kike Escobar (WMF)
Fundación ONG
Unidad Internacional de Oración (UIO)
Restoration Church UK
www.kikeescobar.com
Comments