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Foto del escritorPs. Kike Escobar

La hipocresía, un enemigo de la Iglesia contemporánea

Texto guía Romanos 2:17-24

“Tú, que te llamas judío, confías en la ley de Dios y te jactas de tu relación especial con él. Tú sabes lo que a él le agrada, sabes bien qué es lo correcto, porque se te ha enseñado su ley. Estás convencido de que eres guía para los ciegos y luz para los que andan perdidos en la oscuridad. Piensas que puedes instruir al ignorante y enseñar a los niños los caminos de Dios. Pues estás seguro de que la ley de Dios te da pleno conocimiento y toda la verdad.

Ahora bien, si tú enseñas a otros, ¿por qué no te enseñas a ti mismo? Predicas a otros que no se debe robar, ¿pero tú robas?

Dices que está mal cometer adulterio, ¿pero tú cometes adulterio? Condenas la idolatría, ¿pero tú usas objetos robados de los templos paganos?

Te sientes muy orgulloso de conocer la ley pero deshonras a Dios al quebrantarla.

No es extraño que las Escrituras digan: Los gentiles (las personas que no son judías) blasfeman (hablan mal) el nombre de Dios por causa de ustedes”.

La hipocresía, un enemigo de la Iglesia contemporánea

Nota aclaratoria:

Este es un tema que en la época que fueron escritos los versículos, estaba dirigido a los hombres, los sacerdotes de la época, los maestros de la época. Por lo tanto, su enfoque o énfasis en esta predicación, es sobre los pastores, lideres, maestros y todos aquellos que predican la palabra de Dios.

De vez en cuando, debemos ser confrontados como ministros, como líderes, como pastores, como evangelistas, como apóstoles, como profetas, como hombres de responsabilidad en la predicación de la palabra de Dios.

Introducción

Descubriendo los enemigos de la Iglesia en los últimos tiempos – Libro Seminario de Guerra Espiritual - la Oración de Autoridad. Página 227

Clave - La visión del perro pigbull color crema o beige, comiéndose una mano como muerta.

Hacemos todo lo que podemos para mantener nuestra apariencia exterior atractiva, pero lo que está en nuestro interior, en nuestro corazón es mucho más importante. Lo que somos por dentro (lo que otros no pueden ver) es lo que más importa a Dios.

¿Cómo es usted por dentro?

¿Cómo estamos por dentro en nuestros corazones?

Cuando las personas nos convertimos a Dios cambiamos y en nuestro interior somos diferentes. Él Espíritu Santo continuará ayudándonos a cambiar si se lo pedimos.

Clave / Dios quiere que procuremos pensamientos y motivaciones sanas, no sólo buena alimentación y ejercicios. Existe un culto a lo físico y lo interior (lo espiritual) en muchas personas, está seco.

Clave - Procura al menos, que el mismo tiempo que te ejercitas, sea el mismo tiempo que oras o lees la palabra de Dios. Este desequilibrio está causando mucha sequedad y deserción en el pueblo creyente.

Mateo 15:19

“Pues del corazón salen los malos pensamientos, el asesinato, el adulterio, toda inmoralidad sexual, el robo, la mentira y la calumnia”.

Clave - Un corazón enfermo es una máquina de producción de pecado. Si no trabajamos en nuestros corazones, serán abrevaderos del enemigo.

Analicemos la palabra robo, hurto:

- Del griego Klepto que significa hurtar, y está relacionado con kleptes que significa ladrón; de allí deriva el término castellano cleptomanía (inclinación al robo).

- Klope, relacionado con klepto, significa hurtar (verbo).

- Klemma, significa algo robado.

- Codicia, Deseo vehemente (apasionado) de poseer muchas cosas, especialmente riquezas o bienes.

- Avaricia, Afán de poseer muchas riquezas por el solo placer de atesorarlas sin compartirlas con nadie.

Desarrollo del tema

Retomando las palabras del apóstol Pablo en Romanos 2:17-24

La gente se condena no por lo que desconoce, sino por lo que hace con lo que sabe. Lamentable esto.

Quienes conocemos la Palabra escrita de Dios y su Ley seremos juzgados por ellas.

Quienes nunca han visto una Biblia saben diferenciar entre lo bueno y lo malo, y se les juzgará por no haber tomado en cuenta ni siquiera las normas que su conciencia les dictaba (leyes inscritas en sus corazones).

Si viajáramos alrededor del mundo, descubriríamos en cada sociedad evidencias de la Ley moral de Dios. Por ejemplo, todas las culturas prohíben el homicidio y aun así en todas las sociedades esa ley se quebranta.

Pertenecemos a un género terco, duro, contumaz. Sabemos lo que es bueno, pero insistimos en hacer lo malo. Debemos Admitir muchas veces, ante nosotros y ante Dios que encajamos en el molde humano y que a menudo no cumplimos con las normas establecidas (mucho menos con las de Dios). Ese es el primer paso hacia el perdón y la santidad, admitir no justificar.

En esta palabra, El apóstol Pablo continúa desarrollando su argumento en el sentido de que todos somos culpables delante de Dios. Después de describir el fin de los incrédulos y los gentiles paganos, se ocupa de los religiosos privilegiados (los maestros).

Clave / Los maestros de la palabra (pastores, líderes, evangelistas, etc.) A pesar del conocimiento que tenemos de la voluntad de Dios, también podemos tener culpa por NO vivir lo que creemos y predicamos.

Quienes han crecido en hogares cristianos son los religiosos privilegiados de hoy. La condenación de Pablo es aplicable a ellos si no llegan a vivir conforme a lo que saben y conocen de la palabra de Dios.

Clave - El nacer en cuna santa no te hace salvo, debemos vivir conforme a la palabra de Dios.

Pablo indica a los judíos (los maestros de la ley – los fariseos) que necesitaban auto juzgarse por la Ley y no juzgar a otros. Conocían muy bien la Ley y sabían cómo justificar sus acciones mientras criticaban a los demás.

Clave - Pero la Ley es más que la “letra”. Es una pauta para vivir de acuerdo a la voluntad de Dios y también es una advertencia de que no podemos vivir rectamente sin mantener una relación íntima con Dios.

Jesús confronto la hipocresía de los fariseos de muchas maneras, veamos algunas;

· Retener lo que pertenece a alguien es robar.

Marcos 7:9-13

“Entonces dijo: Ustedes esquivan hábilmente la ley de Dios para aferrarse a su propia tradición.

7:10 Por ejemplo, Moisés les dio la siguiente ley de Dios: “Honra a tu padre y a tu madre” y “Cualquiera que hable irrespetuosamente de su padre o de su madre tendrá que morir”.

7:11 Pero ustedes dicen que está bien que uno le diga a sus padres: “Lo siento, no puedo ayudarlos porque he jurado darle a Dios lo que les hubiera dado a ustedes”. Este fue el pecado de Ananías y Safira. Prometer y o cumplirle a Dios.

7:12 De esta manera, ustedes permiten que la gente desatienda a sus padres necesitados. Estimado amig@, los principios Bíblicos no son negociables.

7:13 Y entonces anulan la palabra de Dios para transmitir su propia tradición. Y éste es sólo un ejemplo entre muchos otros”. Eran manipuladores de la palabra. Delicado esto.

· Mirar a otra persona para codiciarla es adulterio.

Mateo 5:27-28

“Han oído el mandamiento que dice: “No cometas adulterio”. Pero yo digo que el que mira con pasión sexual a una mujer, ya ha cometido adulterio con ella en el corazón”.

Clave - Antes de acusar a otros, debemos mirarnos y verificar si ese pecado, en cualquiera de sus formas, está en nosotros.

Estos versículos son una crítica mordaz a la hipocresía. Es mucho más fácil decir a otros cómo comportarse que vivir como es debido.

Es más fácil decir las palabras buenas que permitirles que echen raíces en nosotros.

¿Aconseja a otros que hagan algo que usted no está dispuesto a hacer?

Debemos procurar que sus palabras las avalen nuestras acciones.

Clave - Si usted dice formar parte del pueblo de Dios, su vida debe reflejar a Dios. Cuando le desobedece, deshonra su nombre y por ello la gente incluso puede hablar mal de Dios (blasfemar).

¿Qué piensa de Dios la gente al contemplar su vida, mi vida?

Hablando de los maestros

· El orgullo espiritual es la clase más peligrosa de orgullo. Los maestros son instruidos en la Ley, podían discernir fácilmente lo bueno de lo malo. Lo bueno y lo malo tienen a veces una línea de demarcación tan fina que no resulta fácil distinguirlos, por eso existe una señal de advertencia que dice; ¡Cuidado! El que se crea firme cuide que no caiga.

Clave / La justificación es la cosa más hipócrita que hace un creyente, de esta manera cava su propio fracaso. Son ciegos guiando ciegos, que peligro Señor.

· Pecaban contra lo que bien sabían, y hacían lo que prohibían a otros. La enseñanza, como la predicación, debe comenzar por uno mismo. Los fariseos derribaban con su conducta lo que edificaban con su enseñanza.

· El mayor impedimento para el progreso del Evangelio lo constituyen aquellos cuyas malas obras hablan más alto que sus buenas palabras: los que en el púlpito hablan tan bien que da pena el que se bajen de él, y fuera del púlpito obran tan mal que es una pena el que suban a él.

Pablo especifica tres pecados abundantes y notorios entre los maestros (pastores, líderes, etc.):

- Hurto (especialmente, a Dios)

Malaquías 3:8- 9

“¿Acaso roba el hombre a Dios? ¡Ustedes me están robando! Y todavía preguntan: “¿En qué te robamos? En los diezmos y en las ofrendas. Ustedes, la nación entera, están bajo gran maldición, pues es a mí a quien están robando”.

Clave / Este versículo es uno de los versículos más predicados hipócritamente, porque una gran parte de los pastores y líderes que lo hacen, no diezman ni ofrendan, oprimen a la membresía y ellos no dan ejemplo.

- Adulterio

Juan. 8:3-11

8:3 Mientras hablaba, los maestros de la ley religiosa y los fariseos le llevaron a una mujer que había sido sorprendida en el acto de adulterio; la pusieron en medio de la multitud.

8:4 Maestro, le dijeron a Jesús, esta mujer fue sorprendida en el acto de adulterio.

8:5 La ley de Moisés manda apedrearla, ¿tú qué dices?.

8:6 Intentaban tenderle una trampa para que dijera algo que pudieran usar en su contra, pero Jesús se inclinó y escribió con el dedo en el polvo.

8:7 Como ellos seguían exigiéndole una respuesta, él se incorporó nuevamente y les dijo: ¡Muy bien, pero el que nunca haya pecado que tire la primera piedra!

8:8 Luego volvió a inclinarse y siguió escribiendo en el polvo.

8:9 Al oír eso, los acusadores se fueron retirando uno tras otro, comenzando por los de más edad, hasta que quedaron sólo Jesús y la mujer en medio de la multitud.

8:10 Entonces Jesús se incorporó de nuevo y le dijo a la mujer: ¿Dónde están los que te acusaban? ¿Ni uno de ellos te condenó?

8:11 Ni uno, Señor, dijo ella. Yo tampoco, le dijo Jesús. Vete y no peques más.

Ninguno era digno de tirar la piedra, todos eran pecadores, unos eran adúlteros, inmorales. Cuantos cristianos han sido hallados en inmoralidades en sus iglesias y ellos mismos eran los más acusadores.

- Sacrilegio (Profanación de algo que se considera sagrado, especialmente cuando el profanador conoce el valor sagrado de lo que profana).

Romanos 2:22

“Dices que está mal cometer adulterio, ¿pero tú cometes adulterio? Condenas la idolatría, ¿pero tú usas objetos robados de los templos paganos?”

Aunque la última frase del versículo 22 parece indicar “saqueo de templos”, conforme al griego. Podría señalar el pecado de los judíos carnales que tenían pocos escrúpulos al comerciar en materiales relacionados con templos paganos, con tal de hacer buen negocio (comerciaban con obras de arte paganas). Esta codicia es equivalente a la idolatría.

- Blasfemia (hablar mal de Dios)

Isaías 52:5

“¿Qué es esto? pregunta El Señor. ¿Por qué está esclavizado mi pueblo nuevamente? Quienes lo gobiernan gritan de júbilo; todo el día blasfeman mi nombre”.

Deshonraban a Dios con sus pecados. Mientras que Dios y su ley eran un honor del que se jactaban, deshonraban a Dios al infringir la ley misma de la que se jactaban, pues daban ocasión a los de fuera para blasfemar (hablar mal de Dios), es decir, para hablar mal, no sólo de la religión cristiana, sino también del nombre sagrado de Dios.

Por causa de vosotros, dice Pablo, el nombre de Dios es blasfemado entre los gentiles.

Pablo parece hacer la siguiente aplicación:

¿Qué peor enemigo que el pecado para esclavizar al pueblo de Dios y presentarlo ante los paganos (podemos aplicarlo a nosotros los cristianos, ante los mundanos) como un pueblo cuya religión no tiene eficacia para hacerlos mejores que los demás?

¿No es este precisamente el “escándalo” que la mayoría de los que se profesan creyentes ofrecen al mundo?

Clave / Dios ha dado a todas las personas desde la creación del género humano el instinto moral, aunque el continuo reincidir en el pecado o una cultura que lo tolera puede distorsionarlo.

Clave / El caso es que esa gente será juzgada de acuerdo con la revelación que haya recibido. La norma para el juicio de los judíos será la Ley escrita; en el caso de los paganos, lo será la ley no escrita, la de la conciencia y la naturaleza.

Clave - A menudo, el peor enemigo del evangelio y del honor de Dios es el pecado hipócrita en las vidas de aquellos que profesan ser creyentes y no lo demuestran en sus testimonios de vida.

Amén.

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