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Foto del escritorPs. Kike Escobar

La recompensa de obedecer a Dios


Rut 2:11-13

“Booz le respondió: He sabido todo lo que has hecho con tu suegra después de la muerte de tu marido, y cómo has dejado a tu padre y a tu madre, y la tierra donde naciste, para venir a un pueblo que no conocías. Que el Señor te recompense por ello, y que recibas tu premio de parte del Señor Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte.

Ella le dijo: Señor mío, me has mostrado tu favor y me has consolado; has hablado al corazón de tu sierva, aunque no soy ni siquiera como una de tus criadas”.

Aunque Booz nunca antes había conocido a Rut, había oído hablar de ella y se había interesado en ella. Tenemos la idea de que muchos le habrán hablado de la joven que había regresado con Noemí, de su bondad y de su belleza. Seguramente le contaron como ella había dejado su tierra natal y se había identificado con el Dios de Israel y con su pueblo. Luego, al conocerla, Booz no podía creer que ella fuera tan maravillosa. Quizá le habían dicho lo mismo en cuanto a muchas otras y por tanto, él no tenía mucha prisa en averiguar si en este caso era verdad, o no. Pero, vemos entonces que ella entró en su campo, él la vio y se enamoró de ella. Es de suma importancia conocer el pasado de esa persona que te interesa, sin embargo, es más importante discernir frente a frente su espíritu y conocer su corazón.

Rut había confiado en el Señor. Por tal motivo había tomado la decisión de dejar su tierra de Moab. Había declarado que el Dios de Noemí sería su Dios. Había abandonado la idolatría para confiar en el Dios vivo y verdadero. Era ya una hija de Dios. Booz se dio cuenta de que él solo no podía recompensarla lo suficiente por su obra, y por tanto, oró que ella fuera abundantemente recompensada por el Señor. Booz declaró sobre Rut una bendición, oró por ella y le deseo lo mejor. Cuan hermoso es usar palabras hermosas, educadas y piadosas para enamorar una mujer, considero que muchas mujeres hoy en día no están preparadas para esta clase de cortejo, prefieren la mentira, el engaño, la vulgaridad y el placer desordenado, a gestos de piedad, amabilidad, cortesía y romanticismo.

Rut aceptó la hospitalidad bondadosa que le fue extendida y reconoció el hecho de que Booz había traído paz a su corazón. Recalcó el hecho de que era extranjera y que no era ni siquiera como una de sus criadas. Pero ella no era como las otras criadas y esa fue la razón por la que Booz se fijó en ella. La belleza física de la joven gentil, junto con su hermoso carácter, hicieron surgir el amor en el corazón de Booz. No hay cosa que enamore más a un hombre que una mujer con carácter, segura de sí misma, piadosa y amable.

Nosotros tenemos un Salvador que nos ama, y nosotros debemos amarle a Él. En 1 de Juan 4:19 el apóstol nos enseña que: “Nosotros le amamos a Él, porque Él nos amó primero”, fuimos diseñados por Dios para amar y ser amados, no fuimos diseñados para mendigar amor.

Este pequeño libro de Rut tiene una historia continuada. Rut entró en el campo que pertenecía a Booz para espigar. Al principio dijimos que hay muchísimos que interpretan el episodio de aquel día como resultado de la suerte o la casualidad. Pero en el programa de Dios no hay tal cosa como suerte, ni casualidad, ni accidentes, hay propósitos. Como el resto de la historia bien lo ilustra, éste no fue un hecho fortuito, sino el resultado de la dirección de la mano invisible de Dios. Todo esto sucedió según la dirección y la guía de Dios. Éste fue un caso de entre millones de tratos providenciales de Dios en los asuntos diarios de los seres humanos. Dios estaba determinando todos los eventos en la vida de esta extranjera, a fin de que ocupara una posición estratégica y fuera un eslabón importante en la genealogía Bíblica, en la sucesión de las generaciones, como una cadena de color rojo, el rojo de la sangre de la redención, que se extiende a través de todas las Escrituras.

En el análisis final, ningún hecho accidental puede ocurrirle a un hijo de Dios. Nada puede pasarle al creyente sin el permiso de Dios. La suerte, el azar, es eliminado de la vida de un hijo de Dios, porque él es como Job del cual Satanás dijo en 1:10: “¿No le has rodeado de tu protección a él y a su casa y a todo lo que tiene?”. El cristiano puede levantarse en medio de las vicisitudes angustiosas de la vida y afirmar como el apóstol Pablo en Romanos 8:28: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”. La clave de este pasaje es estar seguros que estamos viviendo conforme al propósito de Dios ¿está usted viviendo conforme al propósito de Dios?

Creemos que en la actualidad, es importante para cualquier hijo de Dios no esperar hasta que se halle en un punto crítico de la vida para volverse precipitadamente a Dios y vivir cerca de Él. Un creyente debe caminar con Dios día a día, a fin de que cuando se encuentre en un momento crítico, pueda elegir con serenidad el camino por el que debe andar, el camino que Dios quiere que siga para su propio bien. A veces, cuando una persona llega a un punto crítico, queda como bloqueada, inmovilizada y no sabe que debe hacer. Otros, por el contrario, se dejan guiar por los impulsos momentáneos y toman rápidamente una decisión, como si estuviesen huyendo. Pero el hijo de Dios tiene los recursos divinos a su alcance y puede encomendar su camino a Dios y tomar una determinada dirección sintiendo, al mismo tiempo paz y seguridad. No lo olvide nunca, “la bendición del Señor es la que enriquece, y Él no añade tristeza con ella” Proverbios 10:22.

Esta hermosa historia, nos llevará a experimentar lo maravilloso que es obedecer y seguir a Dios. Rut confió y obedeció, por lo tanto fue recompensada con el favor y el consuelo de Dios.

Continuara…

Feliz día, Dios los guarde y los proteja siempre.

Una abrazo.

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